Reconfinado por un esguince en un tobillo, me reconcomía por no poder salir a hacer de nuevo unas fotos a la vía láctea, cuando por la ventana, durante mi horario nocturno cambiado, se coló un ciervo volante.
¡El escarabajo más grande de Europa,
con su cornamenta perfecta
preparada para los violentos combates de su “berrea veraniega”!,
No podía desperdiciar [...]